Los rayos se escabullen entre las hojas,
se le escapan unos cuantos destellos al sol
se sienten en mis manos,
se sienten en mi piel.
No sé si condensan los pensamientos
o los diluyen.
No sé si deba ser paciente
o mejor me refugié
como lo suelo hacer.
No se si pausar todo
o me deba dejar llevar,
pero la realidad
es que me gusta mi soledad.
La realidad es que me gusta contemplar
y no sé si ahora deseo que me contemplen,
la verdad es que mi pequeño espacio me agrada
y no sé si pueda con la invasión.
Quiere venir,
la desconfianza me quiere abrazar.
Se quiere acercar,
el temor me quiere invadir,
pero me detengo solo a respirar,
trato de revolver el pensar
y afirmarme lo que quiero escuchar,
que es un proceso nada más,
que debo esperar,
que debo solo confiar
y que lo mejor vendrá,
que es uno más
un reto más,
que solo debo confiar,
¿estas lista para esto?
me trata de decir,
sí,
yo sé que sí.
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