Diciembre a medias,
no caen lágrimas como el día en que te fuiste,
no caen mis rodillas sobre la alfombra
como cuando al cielo le pedí que te quedaras,
ahora solo hay lágrimas
pero ahora son de felicidad.
Mañana fresca,
estoy en el sitio y tú estás en casa,
mi corazón es tu hogar,
mis manos son tuyas,
mi cuerpo también.
Los mejores recuerdos los tengo contigo,
las mejores vivencias me las has dado tú,
cómo es que todavía dudas,
cómo es que todavía te vas,
cómo es que eres libre,
cómo es que lo logras,
cómo es que eres capaz
de dejarme sin tu esencia,
cómo es que eres capaz
de llenarme así de ti
para marcharte después.
Cómo es que eres fuerte,
cómo es que tus alas te llevan así de alto,
cómo es que no te pesan esas decisiones,
cómo es que te vendiste a la vida,
cómo es que no eres mío,
cómo es que no soy para ti,
cómo se le debe hacer
para conservarte aquí a mi lado,
cómo es que uno lucha con un amor
donde lo más cercano esta tenerlo en los recuerdos,
tenerlo en aquel sitio
con la gente que nos vio pasar,
el viento que nos acaricio,
la sabana que nos cobijó,
Tenerte adentro del corazón ya no es suficiente,
es una buena opción,
pero podría ser otra nuestra historia,
podría tener más ficción,
podría haber terminado de otra forma
pero no lamento la ocasión
porque sé que éste amor no es que haya errado,
solo estamos en otra situación,
porque le pertenece más al destino,
más al viento,
más al futuro y a la libertad,
eres más del allá
que mío.
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